En la búsqueda del éxito, el compromiso y la perseverancia se erigen como pilares fundamentales. En Corea del Sur, estas cualidades se entrelazan con la cultura nacional, formando la base de muchos logros personales y colectivos.
El compromiso en Corea del Sur se manifiesta en diversas facetas de la vida, desde la educación hasta el ámbito laboral. Este sentido de dedicación se origina temprano, cuando los estudiantes aprenden la importancia de comprometerse con sus estudios y actividades extracurriculares. A medida que envejecen, esta cualidad se traduce en un compromiso con sus carreras, familias y sociedades.
Una frase común es "끝까지 가자" ("Vamos hasta el final"), que simboliza el espíritu de never give up. Esta mentalidad de ir hasta el final se considera una virtud y es ampliamente admirada y promovida dentro de la cultura coreana.